ELLÉALE GERARDI
AMIGOS INVISIBLES
Estoy lleno de amigos invisibles.
Vienen a visitarme
en mis magros espacios de silencio.
Con ellos,
escribo,
las más largas novelas que la memoria teje.
Y sigo
por el surco remoto
que deja,
el arado cansado de mi edad,
sobre la tierra
del tiempo y la distancia.
Y llegan del inicio de mis primeros pasos
hasta el sol del ocaso que me asiste.
Algunos, vestidos con delantales
de escuela,
y, otros,
de carpinteros
y de albañiles.
Estos, cargados de nostalgia,
tienen ropas de futbolistas,
y van con una bolsa que rebasa de goles
inolvidables,
y el eufórico aplauso de la hinchada.
Y aquellos,
con carpetones de dibujo
y pinceles de líricos pintores,
son mis colegas de Bellas Artes.
O aquellos,
con cuadernos pentagramados
y libros
de música, teoría
y de solfeo,
son mis amigos cantores.
Me visitan, también,
los viejos compañeros del Banco de Mendoza
y el séquito de gente
que me vio con la lanza de Quijote
buscando un sol de aurora para el bien de los hombres.
También, me llega a los oídos,
el eco de guitarras tonaderas
y la voz del zorzal Carlos Gardel.
Y escucho,
el candombe final
de letras y canciones, de cuentos y poemas
que me caminan
el alma,
y que son frutos
de todos ellos.
Y pienso,
en esos que se fueron y no están,
y en los que están y no pueden moverse.
A algunos
les trémula la voz;
a otros, les tiemblan las manos.
Y estos,
que de tanto en tanto aparecen,
se alegran, todavía,
de que el azar nos junte
en alguna vereda,
y nos diga que estamos.
Por eso,
desde mi soledad,
hoy, sé,
que estoy lleno de amigos invisibles.
-Mendoza, Argentina-
2 comentarios:
Mi querida Norma: Emocionado aún, te agradezco la bondad de la publicación de mi poema.
Te agradezco, también, tus saludos de Navidad y Año Nuevo. Te reitero mi amistad, y te deseo un feliz, grandioso y opíparo 2012,
cargado de salud, dinero, amor, paz, justicia y trabajo. ¡VIVA LA LITERATURA!
Elléale.
Hola Elléale: en tu poema los amigos invisibles hablan con voces representativas de diferentes èpocas y son clamor.Tu soledad está poblada de esos recuerdos riquísimos que son los amores que se llevan en el alma, porque mientras llevamos a alguien en la memoria esa persona vive. Tu poema me conmovió mucho. ¡Gracias! Irene Marks
Publicar un comentario