lunes, 5 de julio de 2010

RAQUEL PIÑEIRO MONGIELLO


HORAS SIN PLAGIO


Se estremece el ojo de la tarde,
cuando alguien anda arbolando
el canto de los ocres,
y mientras maduran
las últimas fogatas del verano,
algo anda tratando de explicar
como en el íntimo orden de un cuento,
el tiempo no sabía disimular sus apuros
ya había impulsos
y cartas de hojas
trayendo otoños...

-Funes, Santa Fe-

6 comentarios:

Juan Carrizo dijo...

Raquel:que nadie plagie tu obra porque es tan bonita tan lograda que da gusto leerle y releerla,mi humilde admiración

Laura Beatriz Chiesa dijo...

Raquel: compartimos esta cuidada Revista, entre palabras hilvanadas.
Lindo poema, amiga. Un beso de,

Anónimo dijo...

El tiempo no sabía disimular sus apuros...qué lindo Raquel y un gusto encontrar tu palabra que es una forma de encontrarte.

Lily Chavez

Mónica Angelino dijo...

No hay forma de disimular los apuros del tiempo.

Besosssssssssss

Ime Biassoni dijo...

Alegría "leerte" aquí querida Raquel, entre juegos y metáforas...
Ime

Analía dijo...

Un gusto leerte, querida Raquel.
Mi cariño
Analía