jueves, 23 de agosto de 2007

RAÚL ACOSTA

REINICIO


El hospital de veteranos de guerras,
cataclismos y desdichas,
está a pleno.
Un niño, visitante, se ha quedado
y nadie pregunta de quien es.

Alegrías, alegrías,
juegos, morisquetas.
El pequeño debe ser feliz,
dicen los viejos,
y se apresuran con juguetes,
trozos de pan, alambres,
finalidades nuevas
para la vieja materia.

El niño pregunta
sin dobleces:
que es una bomba, que es.

En la sala del hospital
de veteranos
el silencio convoca la certeza.

Ay, va a comenzar de nuevo, ay,
va a comenzar de nuevo.



"Testigo"

1 comentario:

Gustavo Tisocco dijo...

Raúl un doloroso poema que deja un gusto amargo...
Un abrazo Gus.